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Un año más, las personas con problemas de salud mental tienen la tasa de empleo más baja
20/12/2018
Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, en 2017 la tasa de empleo de las personas con trastorno mental fue del 18%. Pese a que ha aumentado con respecto a 2016, sigue siendo la más baja entre todos los tipos de discapacidad.
Este miércoles 19 de diciembre, el Instituto Nacional de Estadística ha hecho público su último informe ‘El empleo de las personas con discapacidad. (EPD) 2017’. Aunque los datos reflejan que y se ha detenido la tendencia descendente de años anteriores, «seguimos siendo grupo de personas con la tasa de empleo más baja de toda la discapacidad, por lo que creemos que aún queda mucho por hacer» explica Nel González Zapico, presidente de SALUD MENTAL ESPAÑA.
Tasas de actividad, empleo y paro
Según el INE, lo más alarmante del colectivo de personas con discapacidad es su baja participación en el mercado laboral.
– En 2017 su tasa de actividad fue del 35,0% (dos décimas menos que en 2016), lo que supuso más de 42 puntos inferior a la de la población sin discapacidad.
– La tasa de empleo fue del 25,9%, más de 38 puntos inferior a la de las personas sin discapacidad.
– La tasa de paro superó en más de nueve puntos a la de la población sin discapacidad (26,2% frente a 17,1%). Respecto al año 2016 la tasa de paro se redujo 2,4 puntos, lo mismo que en el caso de las personas sin discapacidad.
Al igual que sucede para la población general, las mujeres con discapacidad tenían menos presencia activa en el mercado laboral. La tasa de empleo de los hombres con discapacidad superó en 0,4 puntos a la de las mujeres. Para el resto de la población de 16 a 64 años, la diferencia fue de 12,6 puntos.
Derecho al empleo para todas las personas
Para concienciar sobre estos alarmantes datos, SALUD MENTAL ESPAÑA conmemoró en 2017 el Día Mundial de la Salud Mental con el lema ‘Trabajar sin máscaras. Emplear sin barreras’. Todas las personas, sin excepción, tienen derecho a acceder y mantener un empleo, por lo que la Confederación reclama que se tomen medidas de manera urgente que permitan revertir esta situación.
Por ello, SALUD MENTAL ESPAÑA sigue reivindicando a la administración pública que impulse con mayor fuerza políticas que favorezcan la transición desde el empleo protegido al empleo ordinario y alerta de que, para prevenir estos problemas, en los entornos laborales se debe cuidar la salud mental de todas las personas, y que se debe poder hablar de ello sin tabúes ni prejuicios.